OFTALMOSCOPÍA INDIRECTA

OFTALMOSCOPÍA INDIRECTA

El examen de la parte interna del ojo se debe realizar con dilatación pupilar para poder visualizar mejor las estructuras oculares. La oftalmoscopía indirecta se puede realizar de manera sencilla con una lente condensadora (la más común es de 20 dioptrías) y una linterna puntiforme o mediante un oftalmoscopio binocular.
La imagen que se obtiene con esta técnica es real e invertida, es decir, todo lo que está a la derecha se va a ver al lado izquierdo y lo que está arriba se verá abajo. El campo visual es amplio pero de poca magnificación.
El empleo de una buena técnica es importante para hacer un buen examen. Luego de haberse producido la midriasis, la lente condensadora se debe mantener a unos 5 cm del ojo del paciente y los dedos de la mano que la sostiene deben rozar apenas su cabeza; la linterna se debe colocar a unos 60 cm entre el ojo del paciente y el ojo del observador. De otro lado, si se cuenta con un oftalmoscopio indirecto binocular, la lente condensadora de 20 d se coloca en la misma posición anterior y la distancia entre los ojos del observador y el ojo del paciente se debe mantener entre 50-80 cm; la imagen que se obtiene es estereoscópica y de mejor calidad; la visión binocular obtenida crea una precepción de profundidad lo cual permite interpretar mejor las elevaciones y depresiones del fondo ocular. Una ventaja adicional que tiene el uso del oftalmoscopio binocular es que permite tener las manos libres, una para sostener la lente y la otra para posicionar adecuadamente la cabeza y los párpados del paciente.

MV Francisco Canales Ríos
Ophthalmo Pet
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